Originalmente publicado en la Revista Orientación Empresaria – Centro Comercial e Industrial Rafaela y Región (CCIRR).
Es el emblema fabril de Zenón Pereyra y compite en el mercado internacional de maquinaria con tecnología de punta, orientada a la agricultura de alto desempeño.
Altina siempre estuvo en Zenón Pereyra y, desde su fundación en 1953, marcó un hito para esta comunidad. En aquellos años llamaba la atención un modesto «tallercito» que fabricaba hileradoras y segadoras motrices con componentes importados desde Inglaterra y Estados Unidos.
De productores a industriales pioneros
Altina ganó prestigio en el mercado de la maquinaria y, cuando Hugo Pivetta tomó sus riendas, inició una nueva etapa que sigue vigente. Hugo era agrónomo y «un apasionado por los suelos», así lo recuerdan sus 4 hijos que hoy lideran Altina. Venía de la producción agropecuaria y entró en un rubro nuevo.
En 1983 comenzó a desarrollar una nueva tecnología para aplicación de fertilizantes y en 1985 lanzó al mercado la primera fertilizadora neumática, siendo Altina pionera en Latinoamérica con ella. En 1986 se alió con Juan Carlos Plá -fundador de PLA- para desarrollar la primera fertilizadora neumática autopropulsada. La tecnología era una innovación absoluta a nivel mundial, aunque había que convencer a los productores. Fue una gama de productos que encontró su mercado aproximadamente 25 años después.
Durante muchos años, junto a su hijo Luciano, Hugo prestó servicios de fertilización con las máquinas que desarrollaba.
Nueva estrategia
Hugo Pivetta y Susana Gaviglio lideraron la empresa durante muchos años. Sus hijos, Luciano y Sebastián ya se habían sumado y tomaron las riendas de la empresa hacia fines de los 90. En 2009 se agregó Esteban Pivetta, actual gerente de Marketing y Estrategia.
Al año siguiente, se embarcaron en un plan estratégico con la premisa de desarrollarse en red con otros miembros de la cadena agroindustrial. Altina se dedicó por completo al desarrollo de fertilizadoras sembradoras neumáticas, capaces de aplicar fertilizantes sólidos y semillas con una precisión y uniformidad inédita. Detrás de esta tecnología, había más de 30 años de desarrollo y perfeccionamiento. Y la brecha fue enorme.
Articulados en el grupo CREA y la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (AAPRESID), también co-fundaron el ecosistema de innovación Agtiva con sede en Rosario.
Crecer con la comunidad
Altina es sinónimo de innovación y experiencia en fertilización neumática. Es líder del sector también en Uruguay y tiene presencia en otros países de la región. Expandió su nave industrial de 1000m2 a 4800m2 y amplió su gama de fertilizadoras sembradoras neumáticas, con la calidad y la integración tecnológica para competir en el mercado global de la maquinaria.
En Zenón Pereyra, tuvo un rol clave en el desarrollo local. Fue miembro fundador de la primera Comisión de Industrias integrada al CCIRR, organizó ruedas de negocios en su pueblo y promovió la llegada de autoridades de la Federación Industrial de Santa Fe (FISFE). Además, participa en instituciones locales y en la Comisión Fundadora de los Bomberos Voluntarios.
Lucila Pivetta se sumó para completar el equipo de hermanos y liderar un proceso de profesionalización de la empresa. Aunque está claro: el espíritu familiar no se negocia.
Así transita esta firma santafesina sus 72 años de historia. A pesar de ser una empresa pequeña en el interior del interior, su legado es claro: invertir en investigación y desarrollo para impulsar el campo con soluciones sustentables para el ambiente.